Cuando el mismo mensaje llega desde direcciones y estímulos diferentes.
Un estudio estadounidense revela que una persona recibe un promedio de 134 correos electrónicos de trabajo a diario. Aquí, para los emisores de Recursos Humanos o Comunicaciones Internas, ¿cómo hacer para que lean mí correo? O, una lista de antídotos para sobrevivir al trash.
Claves para que las comunicaciones fluyan en la dirección adecuada.
La comunicación interna migra constantemente hacia nuevas manifestaciones. Aparece la necesidad de trascender las fronteras y lograr que nuestros colaboradores nos inviten a sus casas. Pues, como dicen por ahí, “si logramos seducir a la familia de la novia, ella al fin se enamora”.
Nuestro cliente Kimberly-Clark nos encargó la campaña del Global Performance Management año 2006, su ciclo de gestión del desempeño. La luna, con toda su poesía y magia retórica nos ayudó a atrapar a la audiencia y desenmarañar un proceso que parecía complejo.