¿Qué es la consultoría en C.I.?

Publicado el 21 de junio de 2011

 Cuando el análisis y la reflexión se hacen fundamentales para lograr una comunicación interna de calidad.

La vorágine del día a día nos imposibilita pensar en lo estratégico. Debemos cumplir con lo urgente y a veces olvidamos lo importante.

La consultoría en comunicación interna es un momento que nos permite pensar. Es dedicarle tiempo y espacio a la reflexión. El aporte de un consultor externo nos permite una mirada desde afuera de la organización, que contribuye con ideas nuevas y creativas.

El consultor brinda ayuda tanto en lo estratégico como en acciones concretas. Posee la experiencia de haber transitado por caminos similares en otras organizaciones. Sabe qué herramientas es conveniente aplicar a cada problemática. Recomienda qué acción desarrollar ante una determinada necesidad.

El espacio es construido entre el cliente y el consultor, en forma conjunta, como aliados. Uno conoce en detalle a la organización, su cultura, sus políticas, su forma de hacer las cosas; el otro aporta su capacidad profesional, su conocimiento del mercado, su mirada sin prejuicios y su creatividad. Es aire fresco para la comunicación interna.

¿Cuándo es necesario contratar consultoría?

• Siempre que se considere necesario contar con un apoyo permanente, tanto a nivel estratégico, como ante cualquier necesidad puntual.
• Cuando se nos presenta una situación novedosa.
• Cuando sentimos que la mirada y opinión de otro puede sernos útil.
• Cuando las preguntas que nos hacemos son: ¿El rumbo de la comunicación interna en mi organización es la correcta? ¿Qué canal es el más adecuado para superar este obstáculo? ¿Cómo lo hicieron otros?
• Cuando debemos intervenir en un escenario de comunicación complejo y sensible, que requiere de un externo imparcial. Puede tratarse de algo que impacte a toda la organización o a un área o sector en particular.
• Cuando la operatoria no nos permite avanzar en lo estratégico.
• Si bien la consultoría suele contratarse por hora, lo ideal es contar con un fee a partir del cual sostener encuentros periódicos con el consultor, porque es esa sistematicidad la que enriquece la gestión.